sábado, 26 de diciembre de 2015

Capturando el momento


Me gusta caminar, es una de las cosas que más me relaja. Normalmente suelo pasear por los alrededores y montes de Oñati por que, afortunadamente tenemos kilometros y kilometros donde andar. Nunca me olvido de la cámara de fotos, aunque el itinerario sea corto, siempre meto en la mochila la cámara con la esperanza de "llevarme" algún momento a casa. Por que... ¿qué es en realidad el echo de tomar fotos? a las personas que nos apasiona la fotografía, después de tomar la foto, la miramos, analizamos e inevitablemente, en nuestro interior empiezan a removerse algunas sensaciones. Para el fotógrafo, sea profesional o aficionado, una foto esconde muchas cosas en su interior, no es solamente una foto en sí, sino que, la imagen nos puede transmitir sentimientos tanto positivos como negativos.  

Hace unos pocos días sobre las cinco de la tarde, con la cámara en la mochila y con mi fiel compañero de rutas (mi perro Pol) emprendí la ruta que normalmente suelo realizar durante la semana. Una ruta sencilla pero a la vez espectacular por los caseríos de Oñati. Anteriormente, me molesté en mirar en internet la hora de la puesta de sol para que, por casualidad y si las condiciones meteorológicas acompañaban, poder captar ese momento del último atardecer de este otoño. Así, llegue al punto donde pensé que desde allí podía tomar una imagen decente de aquella tarde tan espectacular. Dejé la mochila en el suelo y saqué el trípode, los filtros y la cámara. Ensimismada con aquel encuadre y sin poder ver más allá de aquello, coloqué la cámara en el trípode y empecé a sacar fotos. Saqué alrededor de unas diez fotos pero no me convencía aquel encuadre. Pensé que alguna podría salvarse pero no estaba satisfecha de lo que veía, aunque, hasta verlo en el ordenador no tomaría ninguna decisión. Decidí probar con otro encuadre y con una distancia focal más amplia. Me percaté de que en algún caserío estaban quemando algo y salía un humo blanco que, creí que quedaría bien en la imagen. Para eso cerré el diafragma hasta un f/14 y a la vez, aumenté el tiempo de exposición a 30 segundos. De esta manera, conseguí ese efecto de niebla, que en realidad es humo, que se puede observar en la foto. El cielo también estaba de mi lado...


Udalaitz desde Murgia (Oñati)

No se puede negar que el paisaje es espectacular pero, hasta que me senté delante del ordenador y empecé a descargar las imágenes en LightRoom no me di cuenta de lo que había capturado.

Decidí colgarlo en Facebook y la foto ha tenido un alcance más que satisfactorio (gracias a tod@s y a cada un@ de vosotr@s por vuestros "me gusta" y comentarios). Después, lo subí a Flickr. Aunque no frecuento mucho esta red social, tenía la curiosidad de cómo sería recibida la imagen entre los usuarios. Para mi asombro, a las ocho horas de subirla tenía como 950 visitas y unos cuantos habían añadido mi foto a "favoritos" y algún que otro comentario. Para mí, todo aquello era de agradecer a aquellos que tomaron esa molestia de clicar en mi imagen aunque sólo fuera para verla. Unos días más tarde, y a 26 de Diciembre del 2015 las estadísticas hablan por sí solas...


Estadísticas de Flickr


Con esto finalizo el post de hoy. Espero que haya sido de vuestro agrado.

¡¡¡GRACIAS A TODOS POR TODO!!!

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